Y ya ha pasado otro día. Otro día que no te ha aportado nada y el cual tampoco has disfrutado.
Sin haber aportado nada y sin haber hecho algo para que cambie, esperas que vaya todo bien y que termine mejor.
Dejas lo que estás haciendo, y esperas que en otro momento vuelvas a intentarlo y te salga mejor. Y ese es tu consuelo que, como a veces funciona, pues te lo crees.
Una derivada de mierda, me rajo.
¡Melenas largas y labios rojos!
Pieles blancas y pómulos rosados
Coronas brillantes y rosas azules.
Sonrisas de chicle.
No hay comentarios:
Publicar un comentario